Existe un lazo con el que todos tenemos la misma relación, una cita programada desde el día que llegas al mundo, desde el día que empezamos a vivir, una cita que luchas constantemente por evadir, pero que sin importar cuanto te escondas, siempre tendrás que asistir a ella, estés o no preparado. Pero solo un ser es capaz de llegar puntual a saldar aquella deuda que nos impone la vida.